EL AYER DE LA LECTURA Y LA ESCRITURA...
Poder reproducir en la actualidad las prácticas y métodos utilizados por los educadores y docentes en décadas atrás en la práctica del aprendizaje sería algo complejo, afortunadamente existen los textos y libros que a través de los años dejaron huellas y rastros de todos estos procesos, los cuales ayudaron al crecimiento intelectual y moral de los niños y adultos. La historia nos muestra cómo el poder de la política escolar, ha influido en la forma de pensar y sentir de los niños en todos los procesos educativos para lograr sus objetivos. Los primeros textos dan testimonio de la importancia de la lectura y la escritura en aquellos tiempos y se muestra cómo por medio de ellos se efectuaban practicas exclusivistas y de intereses favorables para los entes encargados de elaborar y de diseñar los contenidos que se fueran a publicar e impartir en estos textos.
Nestor Cardoso, realiza una indagación acerca de los textos escolares empleados a partir de 1872 hasta 1917, donde se encuentra las temáticas utilizadas para la enseñanza de la lectura en Colombia. Allí se evidencia una orientación por definir un concepto de hombre, respondiendo a la preferencia del prototipo de hombre europeo: “una persona de sexo masculino, blanco y europeo, excluyendo así a la mujer y los niños, además, ocultando la diversidad de etnias”. Así mismo los temas vistos de lectura resaltaban el ideal de la iglesia de educar en la moral y la virtud.
Los primeros métodos utilizados para el aprendizaje de la lectura y escritura fueron las citolegias, catones, el silabario y algunos manuales y cartillas que se trabajaban en secuencia con el fin de que el estudiante decodificara los símbolos lingüísticos y pudiera producir frases, oraciones y textos cortos. No había interés en fomentar la capacidad crítica del estudiante.
Los mediados del siglo XIX, fue un periodo fuerte de conflicto entre conservadores y liberales. Cada uno defendía sus posturas y luchaba por mantenerlas. Cuando los liberales tomaron el poder, los textos escolares cobraron otro rumbo y se tomaron modelos de pedagogía alemana. Se implementó el método de “instrucción objetiva”, caracterizado por la necesidad de recurrir a la observación, investigación y análisis de los hechos, arguyendo que sólo así se formarían seres.
Así mismo, Pali (1999) analizo la representación de la estructura social de los manuales de lectura en Colombia en el informe cuatro textos utilizados en 1995.
Desde el punto de vista teórico el aporte de “Álzate, Gómez y Romero” es importante en la medida que muestran las diversas tendencias y enfoques metodológicos que se pueden aplicar y estudiar mediante el análisis de los contenidos en los textos escolares utilizados en Colombia.
Según “Martínez Boom, Castro y Villarraga” afirmaban que algunos sujetos pasaban por las estancias y ofrecían enseñar a leer, escribir y contar a cambio de un huevo, una vela o un pan semanal, de allí que se implementaran exámenes para aquellos que desempeñaban habilidades tanto en la lectura como en la escritura apoyándose en el manual de enseñanza como herramienta o medicación de los conocimientos necesarios para el aprendizaje de estos. (Cardoso, 2001)
Estos método de enseñanza contenían algunas designaciones, y eran llamadas citolegías, catones, silabarios, manuales y cartillas entre otros: la primera por su parte hace énfasis en las diferentes ayudas para la enseñanza de la lectura, estas consistían en cuadros o gráficos que acompañados de vocablos servían para el aprendizaje de las primeras letras, fueron antecedentes de los textos de lectura propiamente dichos.
El termino silabario hacía referencia al método y texto para enseñar a leer, consistía en la presentación de silabas para que el alumno repitiera hasta memorizarlas, este tipo de metodología servía como parte de la preparación para aprender a leer y el centro de atención era mecanizar los sonidos para combinar consonantes y vocales.
El catón era una ayuda que superaba al silabario, servía para ejercitar la memoria de los principiantes, para pasar luego al texto leído de corrido, donde se utilizaban los libros de lectura también denominados manuales o cartillas.
En cuanto a la escritura, se incluía la posición para escribir, la preparación de las plumas para los tipos de letra en dicha época, también se utilizó para la enseñanza de la lectura y la escritura la cartilla lacónica de primeras letras.
Otra de las metodologías que se dieron en aquel tiempo consistían en el uso de las guías alemanas en el proceso de aprendizaje de la lectura y la escritura, el uso del método de Lancáster para enseñar a leer se basaba de carteles y no de textos, en cambio el método pestalociano se requería la utilización de un texto para cada niño.
La implementación de estos métodos y didácticas de enseñanza, fueron revaloradas a inicios de la década de los 70’s donde se implantaron las primeras reformas educativas que respondían a la necesidad de re-valorar los rígidos esquemas pedagógicos y los rituales formalistas, usuales en las prácticas educativas del momento.
La década de los 70’s fue testigo de las primeras reformas educativas. Entre estas transformaciones se encuentra la tecnología educativa que tenía un referente fundamental en cuanto a la planeación. Un maestro solo tenía que saber planear muy bien sus clases y sujetarse al currículo, este era el principal motivo por el cual el maestro no era destacado como un profesional pensante.
Una de las organizaciones que promovió y protegió el estatuto docente fue FECODE. Su objetivo era que al maestro se le diera un reconocimiento desde la legalidad, Donde se manifestaba una “preocupación creciente por el papel del maestro en las esferas social, política y cultural del país”. (Echeverri, 2010).
En cuanto la lectura lo que se pretendía era recuperar una imagen del maestro intelectual y se buscaba crear una nueva generación de intelectuales donde el estudio, la investigación y la reflexión estuvieran vinculados con el quehacer político la organización y la acción de masas.
En 1982 nace el movimiento pedagógico acompañado por el grupo de prácticas pedagógicas y el grupo Federici, que proponían la “recuperación del maestro como trabajador de la cultura y con proyección a la sociedad, una lucha por la pedagogía y la educación democrática […], propendiendo por la reivindicación del maestro y por la educación al servicio del pueblo” (Echeverri, 2010), para esto era indispensable que el maestro ejerciera una postura autónoma, crítica y reflexiva en su campo en específico.
El logro del Movimiento pedagógico se evidenció en la reforma de la ley de 1994. Allí el movimiento tuvo un estancamiento, pero sus logros dieron paso a la expedición pedagógica. Fue una movilización física y de pensamiento donde se recorrió todo el territorio nacional. Esta movilización resaltó al maestro en cuanto a su cambio de su pensamiento y al surgimiento de nuevos "despliegues científicos y tecnológicos dentro del proceso de formación” (Echeverri, 2010). Finalmente, esta propuesta abarcaba que el maestro debía remontarse en su historia y comprender los campos sociales, culturales y económicos, para que se reconociera dentro de su esfera laboral y pudiera crear una nueva identidad que propendiera por poseer un sentido crítico y reflexivo. Es decir que el maestro se convirtiera en otro, y se movilizara “de su contexto hacedor, de aplicador, a una condición más teórica, lo que supondría una perspectiva con vuelo intelectual” (Echeverri, 2010)
En cuanto la lectura y escritura en el movimiento pedagógico, se legitima el carácter crítico, investigativo e intelectual, donde se genera una reforma curricular que busca reorganizar el sistema educativo. Es así como se implementa la participación de la escuela nacional sindical en la medida que FECODE empieza a liderar el movimiento pedagógico como acción liberadora de la dominación estatal para darle fundamento teórico pedagógico. El movimiento considera la divulgación de la revista educación y cultura como un órgano de difusión para luchar por la reforma educativa y la defensa de la educación pública. También es un instrumento para generar en los maestros una formación de la conciencia, la expresión del pensamiento y la creatividad de los educadores.
Se consideraba a el maestro como un empleado oficial y como tal un profesional que despliega su práctica en parte subordinado a los lineamientos públicos en parte resistente a los mismos y defiende su autarquía, arguyendo ser trabajador de la cultura y no del estado y menos del gobierno vigente que gracias a las luchas de los maestros se ha ganado terreno en una carrera que anteriormente era remunerada con aguardiente y tabaco.
En cuanto a lo que se dice del maestro en la década de 1980 se abarca en este sentido el cambio en el rol del maestro ,en tanto apoyo de las formas del control estatal, así como eje principal la escuela en él y en su aprendizaje, la acción del maestro abre las puertas a los discursos novedosos de la sociología y de la sicología , que reflejan o expresan el aprendizaje y obran en menoscabo de la capacidad teórica del maestro para reflexionar su saber y los problemas propios de los saberes o de los lenguajes, se presenta el currículo como un dispositivo tecnológico educativo , en tanto programación para obtener una instrucción más efectiva con lo que se enfatiza la crítica educativa para el rendimiento .
Referencias una aproximación a los textos de lectura Néstor Cardozo Erlan www.aprendeenlinea.udea.edu.co, pugnas entre el movimiento pedagógico y el estado paradojas y crisis del maestro y la institución un análisis documental en la revista de educación y cultura 1984 2005 por María Lopera Rendón y Faber Andrés Piedrahita Lara
Revisando la historia, podemos ver cómo el poder de las políticas escolares ha influenciado la forma tanto de pensar como de sentir de los niños, en sus procesos educativos para lograr sus objetivos. Los primeros textos dan testimonio de la importancia de la lectura y la escritura para la época y como por medio de ellos se efectuaban prácticas exclusivistas y de intereses favorables para los entes encargados de elaborar y de diseñar los contenidos que se fueran a publicar e impartir por medio de ellos.
Son varios los autores que analizaron y estudiaron los textos que circularon en décadas pasadas y la conclusión de tal estudio deja en evidencia las preferencias por un prototipo de hombre blanco y europeo, desconociendo todos los diferentes tipos de culturas existentes, relegándolos a un segundo plano sin importancia, las mujeres no escapan de este tipo de práctica exclusivista y varios autores narran con lujo de detalle la poca participación que ellas tenían siendo relegadas, solo al aspecto familiar.
NUEVO COMIENZO
Luis Alfonso Tamayo, hace un recuento de las tendencias empleadas en Colombia durante el periodo de los 80’s hasta el 2006, donde se muestra las corrientes de pensamiento pedagógico que han influido en las prácticas de enseñanza a partir del llamado “movimiento pedagógico”. En primer lugar, se toma la pedagogía como dispositivo, es decir “un aparato instrumental de la ideología, un sistema significante que elabora sus propias normas a partir de otras disciplinas y construye una serie de instrumentos (reglas) para incidir en discursos no pedagógicos”. (Tamayo, 2007). La idea era situar la pedagogía como un saber en donde se transforme la teoría a la práctica y se aplique en la cultura u organizaciones sociales, regulando los discursos, significados y prácticas.
Consecutivamente se instaura la pedagogía como disciplina siendo aquella que “conceptualiza, aplica y experimenta los distintos conocimientos acerca de la enseñanza de los saberes específicos en una determinada cultura” (Tamayo, 2007). Se trata de construir teoría que se lleva al discurso, en la cual se elaboran nociones, conceptos, métodos, fines que se aplican en la enseñanza con el fin de recuperar el pensamiento, la cultura, los métodos de enseñanza, haciéndolos aplicable en la vida cotidiana.
La pedagogía como disciplina reconstructiva busca agrupar tres direcciones por las que se ha inclinado. Se da paso a “una moral basada en la oposición entre deber o inclinación a una moral basada en la expresión de lo deseos y su regulación para la interacción y la comunicación” (Tamayo, 2007). Se aplica una nueva visión del mundo, formando en la disciplina asociada a la cultura, y manteniéndose en constante interacción con ella.
Finalmente, nos situamos en una pedagogía constructivista que “permite desde su polisemia, múltiples abordajes para reconstruir los procesos de conocimiento y adecuar a ellos las formas de enseñanza”. (Tamayo, 2007) Este enfoque ha tenido gran influencia en la investigación pedagógica del país, de una manera directa en la enseñanza de la ciencia, en los procesos lecto-escriturales y educación matemática.
En cuanto a la lectura y escritura, el maestro ocupa el rol de acompañante en los procesos, dónde implemente desde el aula métodos en los que:
v Permita a los estudiantes construir textos de manera espontanea
v interactúen con diferentes tipos de textos y saquen de ellos sus propias interpretaciones
v Se estimule la lectura por gusto
v Que hallan vínculos afectivos sólidos entre el maestro y el estudiante
En consecuencia de estos planteamientos y como respuesta coherente para abrir los procesos a nuevos desafíos es como se pretende que las técnicas y métodos en relación a la enseñanza de la lectura y la escritura sean “re- contextualizados” y se busque así nuevas estrategias con el fin de favorecer los procesos de lectura y escritura:
v Dar importancia a la comprensión lectora.
v Enfatizar en la lectura y escritura de textos completos.
v La didáctica debe adecuarse a los intereses individuales, estilos y ritmos de a aprendizaje.
v Que los alumnos analicen, entiendan y confronten los contenidos de un texto a la luz de su bagaje conceptual, cultural, lingüístico.
Con estos desafíos, la tendencia constructivista se instaura en la actualidad de manera inminente en la implementación de nuevas didácticas como las TIC, enfocadas en brindar un acercamiento a la diversidad de culturas y nuevos conocimientos y a su vez enfocarlas en los diferentes procesos que se desarrollan en el campo de la educación y de aquellos elementos existentes tanto en la enseñanza como en el aprendizaje. Esta nueva didáctica, se ocupa de los métodos y técnicas empleados como herramientas que llevan a los educadores a desarrollar espacios donde la lectura y la escritura se conviertan en objeto de conocimiento.
De esta manera, se revela novedosas tendencias que buscan que estemos más próximos a recursos que promuevan el desarrollo y sostenimiento del país. Las TIC se convierten entonces en una “oportunidad interesante para mejorar la calidad de la educación rural, y facilitar a las comunidades campesinas el acceso a los beneficios del desarrollo, y su participación e inserción en un mundo cada vez más interconectado y globalizado”. (UdeA, 2008). Sin embargo, se hace alusión a que la didáctica debe ser estimulante- atractiva –y eficiente. Utilizando los recursos más próximos y asequibles posibles como: libros impresos, enciclopedias, textos de diferentes géneros, diccionario- portales de internet, etcétera. Y como resultado llevar al estudiante a un reconocimiento de las palabras- dominio del vocabulario- emplear programas con audio para identificar diferencias fonológicas, emplear rompe cabezas léxicos para deletrear y combinar los procesos escriturales.
Hablando específicamente de los criterios de evaluación, aparece un el concepto de “competencias”, que se instaura con el esfuerzo por fomentar la lectura y escritura, donde los estudiantes en los diferentes niveles, desarrollen competencias comunicativas teniendo en cuenta los contextos socio-culturales a los que se enfrenta. En efecto, lo relevante aquí es la investigación que se ha desarrollado en cuanto a la finalidad y el uso de las “TIC”, sobre todo para aprovecharlas en el fortalecimiento en la materia aquí estudiada. Aparecen por tanto dos componentes o enfoques por los cuales estas son aplicadas.
Informáticos- estos por su parte han permitido una motivación mayor en los estudiantes.- a que los textos que se escriben son con más fluidez- el aspecto visual, auditivo y físico se centran en los aparatos electrónicos sobre todo en el computador- de evidencian menos errores gramaticales, de puntuación etc.
Telemáticos- se refiere a: correos electrónicos- audio conferencias- video conferencias- discusión de textos en cursos virtuales- ensayos asistidos (ordenador). En este aspecto es conveniente que los agentes tengan un manejo adecuado que les permita una buena comprensión de lo leído- teniendo en cuenta las variables de la lectura y la escritura.
Planes Nacionales para el fomento de la Lectura y escritura en Colombia.
Los proyectos de lectura y escritura, situados en la actualidad, corresponden a una serie de investigaciones realizadas a partir del 1996. Posada y Barrio plantearon lo siguiente: de las investigaciones hechas en Colombia sobre la lecto-escritura tenemos tres referentes importantes enfocadas a:
ü Las dificultades en la lecto- escritura
ü Desarrollo del habla y el lenguaje
ü la literatura infantil- y la escritura
Ahora bien, estos autores se enfocan sobre todo en la primera investigación (las dificultades en lecto-escritura), que se fundamenta en “teorías constructivista”, abordando de esta modo los procesos de aprendizaje, las relaciones (niveles fonológicos) los procesos cognitivos, y el material didáctico que las centros educativos utilizan a la hora de enseñar a leer y escribir”. Amerita por tanto decir, que las investigaciones realizadas por parte de las instituciones sobre la lectura y la escritura son muy pocas. En relación esto, lo poco que se tiene de estas (lectura y escritura) han estado abordadas en gran parte por los trabajos de tesis y producción intelectual de algunos profesores universitarios que se han interesado por estos temas.
Por otra parte, previamente el gobierno en 1993 empezó en coordinación del MEN (Ministerio de Educación Nacional) una primera investigación, que tenía como centro “evaluar sobre la calidad de la educación básica” es decir, (Sistema Nacional de Educación de la Calidad de la Educación: prueba SABER. Esta investigación llega a la conclusión de las grandes falencias a las que está expuesta la lectura y la escritura en las instituciones educativas- básicamente en los grados 3 y 5 de la básica.
En un primer momento la intención de la investigación era evaluar en los niños y jóvenes sobre todo en lectura, escritura y matemáticas. Así mismo, evaluaba las competencias, el área del saber, los procesos de enseñanza y por último las formas en que se enseñaba ese saber. Pero los resultados fueron alarmantes, puesto que el nivel de lectura y escritura de los colombianos estaba por debajo de muchos otros países latinoamericanos. Se abre las puertas entonces a una iniciativa que le apueste por fomentar antes que evaluar los procesos lectores o escriturales: profundizar en el área del saber, darle valor a lo pedagógico, evaluar con mesura, brindar oportunidades para el aprendizaje.
La segunda investigación fue realizada por COPES OCCIDENTE- de la Universidad de Antioquia, pero fue solo para evaluar el occidente- * En el contexto nacional destacamos algunas investigaciones que han centrado su atención en la lectura y la escritura.
Responsable: Fabio Jurado (investigación- “evaluación de las competencias” por la Universidad Nacional. *Responsable: María Cristina M. (investigación- “análisis del discurso”. *Responsable: Gloria Rincón (investigación- “proyecto de aula”. *Responsable: Miralba Correa (investigación- “escritura y narrativa- grupo cognición- lenguaje y educación. Por parte de la Universidad del Valle. (Isaza, 2001)
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